Hoy es 22 DE JULIO DE 2025. A veces me sorprendo atrapado en recuerdos que ya no puedo cambiar o en planes que todavía no existen. Me doy cuenta de que mi mente viaja más rápido que mi respiración, y en ese vaivén pierdo la oportunidad de saborear lo que tengo frente a mí. Hoy quiero recordarme que la felicidad no es un lugar al que llegaré mañana, sino un instante que se abre ante mí cada vez que respiro.
Aceptar este presente, con sus luces y sombras, me reconcilia con la vida tal como es. No necesito que todo sea perfecto para sentirme en paz; basta con detenerme, observar y agradecer. Cuando suelto la ansiedad del futuro y la nostalgia del pasado, descubro que aquí, justo ahora, la vida me ofrece un regalo único.
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